El futuro de las pensiones públicas se decide en Madrid y Bruselas.
En Madrid, el miércoles, 19, una nueva reunión del Pacto de Toledo
estudiará la actualización anual de las pensiones.
Esta reunión no se habría producido sin las masivas movilizaciones de las personas pensionistas en los últimos meses.
El momento es decisivo. Por eso, reiteramos nuestra reivindicación:las pensiones deben subir cada año tanto como lo haga el Índice de precios al consumo. Esta es la única garantía de que las personas pensionistas conservarán su poder adquisitivo y no serán, cada año, un poco más
pobres.
Entre 29 estados europeos, el Estado español es el único, repetimos, EL ÚNICO, en el que la subida anual de las pensiones NO se calcula según el IPC. Estamos decididas y decididos a acabar con esa anomalía.
El Sistema Público de Pensiones es el mecanismo más importante de lucha contra la pobreza entre las personas mayores.Llamamos a laspersonas pensionistas y a todas las trabajadoras y trabajadores a movilizarse hasta que el Pacto de Toledo apruebe la subida anual de las pensiones según el IPC.
Sí, el momento es decisivo. En los meses pasados demostramos nuestra firme voluntad de defender el Sistema Público de Pensiones. Continuaremos ocupando las calles y las plazas hasta conseguir que las pensiones públicas suban cada año tanto como el IPC.
Pero, el futuro de las pensiones también se decide en Bruselas. La Comisión Europea le propuso al Parlamento Europeo que apruebe un nuevo producto financiero, llamado producto paneuropeo de pensiones individuales (PEPP).
La Comisión Europea establece como principal objetivo del PEPP alimentar los mercados financieros con el ahorro de las/los ciudadana/os.
La Comisión Europea propone que los estados miembros aprueben desgravaciones fiscales para los fondos privados de capitalización. Estas desgravaciones solo benefician a los ingresos más altos, son fiscalmente regresivas y reducen los ingresos de las administraciones públicas.
El PEPP no es un instrumento de protección social, sino un nuevo producto financiero, que contribuirá a alimentar el casino especulativo global, que estuvo en el origen de las crisis que estalló en 2007, y que está creando las condiciones para nuevas y violentas turbulencias económicas.
La Comisión Europea defiende los intereses de los especuladores y las entidades financieras, antes que los derechos de las y los pensionistas actuales y futuros.
La Comisión Europea olvida que casi una de cada 5 personas mayores de 65 años se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social. La Comisión Europea ama a los ricos y poderosos, y desprecia e ignora a las personas mayores pobres.Si se aprueba el PEPP, aumentará la pobreza
entre las personas mayores, al tiempo que aumentarán los beneficios del capital financiero.
Como mujeres y hombres libres y conscientes de nuestros derechos,denunciamos estas propuestas corruptas e injustas y nos oponemos a la aprobación del producto paneuropeo de pensiones individuales.
La Unión Europea renuncia a exigir de los estados miembros que garanticen pensiones públicas suficientes para que las personas pensionistas puedan vivir dignamente.
Hacemos un solemne llamamiento a todas las europarlamentarias y europarlamentariosa votar, en el Pleno del Parlamento europeo, en contra del PEPP. El sentido de su voto mostrará si defienden el derecho de la mayoría social a una vida digna, o se someten a los intereses de los capitales financieros y de los especuladores.
En Madrid, exigimos que el Pacto de Toledo apruebe la actualización de las pensiones de acuerdo con el IPC.
En Bruselas, exigimos que el Parlamento europeo vote en contra del PEPP.
Continuaremos movilizándonos, no pararemos hasta conseguir nuestras reivindicaciones.
Amigas, amigos, compañeras, compañeros:
No al PEPP, no al PEPP, no al PEPP!
Comisión Europea, corrompe y privatiza!
Subida anual, según el IPC!
Estas batallas, las vamos a ganar!